Dormir mejor: experiencias de clientes con el CBD

Solía tener un vape de CBD y conocía los beneficios más comunes del CBD para la salud desde hacía bastante tiempo, pero no lo usaba regularmente. Sin embargo, recientemente he tenido muchos desequilibrios hormonales y, por curiosidad, empecé a preguntar si el aceite de CBD podría ayudar, ya que sabía que hay muchos beneficios que son menos conocidos. Me enteré de que un miembro de la familia empezó a usarlo por razones similares, así que decidí probarlo por mí misma.

Esperaba que me ayudara a regular mis hormonas o a minimizar los síntomas que tenía. Tenía una menstruación irregular, con reglas abundantes cada dos semanas. También esperaba que me aliviara los dolores abdominales que me acompañaban, así como que mejorara mi sueño.

Hace unos 3 meses que empecé a tomar aceite de CBD diariamente. En un mes, las hemorragias irregulares cesaron y no han vuelto a ocurrir. En cuanto al dolor, se ha calmado a la semana de la primera dosis, y mi sueño ha mejorado enseguida. He podido conseguir más horas de sueño profundo, lo que antes era muy difícil con mi trabajo y los turnos largos e irregulares en el hospital.

Empecé con 3-5 gotas cada noche, justo antes de acostarme. Ahora he podido reducirlo a 1 gota del aceite de CBD al 20% cada noche sin que disminuyan los efectos positivos.

El aceite de CBD es mi favorito, ya que realmente me ayuda en mi vida diaria. Sin embargo, también me gustan las galletas de proteína de CBD, son deliciosas y tienen un sabor ligero y no demasiado dulce, lo que es perfecto.

La primera vez que los probé fue porque me los regalaron, pero seguí comprándolos por los buenos resultados que me dieron. Me encanta que los productos de CBD sean eficaces, pero además, como enfermera, puedo confiar en que el CBD es de alta calidad y no contiene THC, por lo que estoy cómoda y tranquila tomándolo en el trabajo.

Soy un hombre de 70 años con esclerosis múltiple secundaria progresiva grave, y sufrí todos los posibles efectos secundarios de los medicamentos que estaba tomando. Era horrible. A veces el remedio era peor que la enfermedad.

Mi hija nos habló del CBD en mayo, y desde ese momento María (mi mujer) investigó en internet por su cuenta sobre este cannabinoide. Después de visitar muchos blogs y páginas online, nos decantamos por Naturecan porque era la tienda que más información proporcionaba y la quemás confianza nos daba. Una de las cosas que tuvimos clara desde el principio fue que queríamos aceite de CBD de amplio espectro.

El CBD nos está ayudando mucho. Los medicamentos nos hacían pasar un mal rato. Desde que mi marido toma CBD, duerme mejor y tiene menos dolor muscular, su espasticidad es mejor y está más relajado. Después de muchos años de un sueño de muy mala calidad, Carlos se despierta incluso con agua en los ojos, señal de un descanso profundo y reparador. Una de las cosas que más valoramos del CBD es que se trata de un producto natural que no nos ha causado ningún efecto secundario. 

Hasta ahora hemos probado el aceite de CBD al 20% y el aceite de masaje de CBD. Recientemente hemos comprado aceite de CBD+CBG al 10% y tenemos intención de probar el nuevo spray de CBD. Estamos muy contentos con el producto y queremos probar otros formatos hasta encontrar el que mejor se adapte a nuestras necesidades.

Carlos toma, por vía sublingual, 2 gotas de CBD 20% al levantarse, 2 más por la tarde y 4 más antes de irse a dormir. Un total de 68 mg de CBD. También se masajea diariamente con el aceite de masaje de CBD.

Muy rápidamente, yo diría que desde el primer día. Como curiosidad, después de unas semanas de evidente mejoría, un día Carlos sintió más dolor y más nerviosismo, y coincidió con una mañana en la que había olvidado tomar las 2 gotas de CBD. Volvió a tomar el CBD y el día empezó a mejorar.

Durante años he tenido problemas para dormir, y esto es principalmente por lo que empecé a tomar CBD. ¡Y tengo que decir que, ¡funcionó de maravilla! al cabo de unas semanas estaba durmiendo como un bebé, y me acordaba de todo lo que soñaba. Fue clave para mí, ya que hago ejercicio de alta intensidad casi todos los días, por lo que realmente necesitaba unos buenos patrones de sueño para recuperarme al máximo. Después de un tiempo, empecé a usar la crema de árnica CBD y el bálsamo muscular y que también me vinieron perfectos.

Trastornos del sueño: El CBD me ayudó a dormirme más rápido y a tener un sueño profundo para poder recuperarme mejor de mis entrenamientos. Estrés: También estoy tomando CBD por la mañana antes de empezar a trabajar y he visto una gran diferencia con el estrés y el nivel de cortisol (disminuyendo). Me siento más tranquila cada día. Dolores musculares: Al hacer deporte de alta intensidad semanalmente, tengo bastantes dolores, y desde que uso los distintos bálsamos un par de veces cada dos o tres días, me recuepro más rápido para el siguiente entrenamiento.

Llevo usándolo de forma intermitente desde hace unos 2 años. Me gusta hacer un mes de uso y un mes de descanso. Tardé unas dos semanas en ver los primeros resultados/efectos.

Cuando es un mes ON, tomo una gominola por la mañana y unas gotas por la noche mientras leo en la cama.

Sin duda el aceite de CBD, ya que es de los más efectivos para mis diferentes problemas. Y también la Crema árnica CBD, que también me encanta y huele súper bien, podría usarlo todos los días 

Me lo recomendó mi psicólogo para mis problemas para dormir.

Bastante. Me ayuda a tener un sueño más profundo y consistente.

Lo tomo a diario.

Empecé a ver los primeros resultados a las 3-4 semanas.

El aceite CBD 20% por la noche me ayuda mucho. Y las cápsulas aceleradoras al mediodía también las he probado unas cuantas veces y me ayudan.

Los vídeos de Pantelis Stavroulakis. Hasta entonces utilizaba otra marca.

Quizás crear algunos lotes con productos para usar a todas horas del día. O lotes de productos especiales para deportistas.

En mi caso, empecé a tomarlo para prepararme para una competición. Fue más o menos en 2019, cuando usé por primera vez el CBD. Soy culturista de competición y para competiciones de este tipo tienes que hacer una dieta bastante larga y dura y eso, por supuesto, afecta al nivel de estrés. Cuando consumes menos carbohidratos, tu nivel de Protisol aumenta automáticamente, lo que tiene un efecto negativo en la calidad del sueño. El sueño es muy importante para una buena quema de grasa y para la recuperación después del entrenamiento y fue entonces cuando tuve el primer contacto con el CBD a través de gente del gimnasio que también lo usaba. En ese momento, empecé con el CBD y las gotas de melatonina y las tomaba antes de ir a dormir y posteriormente me metí un poco más en el tema para tratar la inflamación y demás. Así que compré dos veces para prepararme las competiciones, y además también me resultó muy útil para bajar el nivel de estrés. 

Noté el efecto de forma relativamente inmediata. Se recomienda probar inicialmente la cantidad de gotas para encontrar tu dosis, y dejar las gotas en la boca durante un minuto aproximadamente. También me aconsejaron que no comiera ni bebiera directamente durante 10 minutos después, y siempre lo hice entre 30 y 60 minutos antes de irme a dormir, y definitivamente dormí mejor. He notado que me duermo más rápido y me despierto con menos frecuencia. Tengo que decir que con una dieta tan competitiva había noches en las que me despertaba 10 veces en 8 horas, lo que es una calidad de sueño realmente absurda.

No, no hice ningún seguimiento. No usé un Fitbit ni nada parecido en su momento, pero tampoco lo hago hoy. Medirlo todo es demasiada presión, pero desde luego noté que me domía más rápido y me despertaba menos. Como culturista, si comes muy pocos carbohidratos, porque se unen con el agua, tienes que orinar más a menudo durante la noche, porque se almacena muy poca agua. La mayoría de veces que te despiertas es para ir al baño. He notado que me despierto menos y así duermo algunas horas más. Soy muy fan de las gotas de melatonina de Naturecan y con ellas noto muy, muy claramente que puedo dormir fácilmente entre 5 y 6 horas. Es una gran diferencia, normalmente me despertaba cada 2-3 horas. Es realmente una mejora y me quita mucho estrés.

Sí, mi primer contacto fue por una combinación de querer bajar el nivel de estrés y dormir mejor. Como sabes, hago muchas cosas a lo largo del día, tengo un trabajo a tiempo completo como un cuidador en un zoológico, y también soy un culturista competitivo y produzco contenido en Instagram y TikTok. Además, también soy entrenador y, en general, tengo muchas cosas que hacer. También tengo una familia, un hijo, el segundo ya está en camino y tendremos un perro el mes que viene. Así que mi rutina diaria es levantarme a las 5:20 y luego hacer cardio, encender el portátil e ir a tope todo el día. Especialmente cuando entrenas a 30 personas, tu móvil siempre está sonando y eso es muy estresante. A menudo me doy cuenta de que a la hora de dormir todavía siento ese estrés, porque cuando por fin quieres desconectar el móvil siempre vuelve a sonar. Ahora uso el CBD por la noche y también a lo largo del día y noto una diferencia increíble. Especialmente por la noche, cuando sé que ya he terminado todo lo que tenía que hacer, me tomo mis gotas de CBD y me ayudan a relajarme. Además, también lo uso mucho para tratar la inflamación, y me ha ayudado muchocon los dolores articulares. 

Jaja, ¡depende de la situación! A veces me doy un capricho con una galleta de CBD por la noche y me ayuda a dormir mejor y estar más descansado. Además, al ser entrenador, también pienso en opciones que sean interesante para mis clientes. Por eso me gustan sus que tengan tantos tipos de productos, porque no a todo el mundo le gusta el sabor del aceite. De esta forma, Naturecan hace que el CBD sea accesible para todo el mundo.

Ahora mismo algo menos de 30 mg porque aún estoy esperando mi nuevo pedido, pero hasta hace poco rondaba los 50-60 mg. Tomo la cápsula de CBD micelar, las cápsulas de CBD con curcumina y por la noche las gotas de melatonina de CBD. De todos modos, tomo muchos suplementos y lo planifico a lo largo de la semana para saber qué tomar mañana, tarde y noche. 

Fui aumentando poco a poco. Ya había probado antes el CBD, en cápsulas de 25 mg. Las tomaba para preparar las competiciones y para aliviar el estrés. Sabía que al final de la dieta pesaría entre 108 y 109 kg, lo que significa que ya al subir de peso con 10 mg de CBD no iba sentir tanto los efectos. Por eso fui subiendo hasta llegar a estas cantidades, porque ya sabía desde entonces que 25 mg de CBD me sientan bastante bien y que todavía había margen de mejora y de seguir aumentando la dosis. Además, antes no me podía permitir economicamente experimentar mucho con las dosis o y subirlas tanto. Ahora que tengo la posibilidad quería ver qué tal me funcionaba una dosis mayor, sobre todo por el tema del dolor articular. Para conciliar el sueño por la noche, no necesito tanto, debo decir. Tomo 6 gotas del 10% de CBD con melatonina y eso me funciona. No he experimentado con tomar más, porque en realidad esta combinación me parece muy útil. Era más bien por el dolor de las articulaciones, porque me parecía realmente molesto no poder hacer el deporte sin sufrir dolor, así que me valía la pena tomar mucho y ver cómo funcionaba.

Lo de quedarme dormido más rápido lo noté inmediatamente, como el primer o segundo día. Las gotas siempre me han funcionado muy bien. En cuanto al dolor de las articulaciones, tomando los productos que he dicho antes, el bálsamo y la curcumina, lo empecé a notar a partir de la segunda o tercera semana. El último entrenamiento de piernas, que acabo de mencionar, no tuve apenas dolor, eso es lo que más destacaría. Pero antes de esas dos o tres semanas ya me di cuenta de que estaba mejorando. Mis rodillas estaban mejor, pero no sabía si era simplemente una coincidencia, pero después de tres semanas fue una clara mejora en las articulaciones.

Nunca tomé ibuprofeno porque bloquea el desarrollo muscular, ya que crecimiento muscular también se desencadena por procesos inflamatorios. Así que desde el principio tuve claro que tomar ibuprofeno no era una opción. Sobre todo usaba pomadas de calor: antes del entrenamiento te untas las articulaciones con ungüento caliente y después del entrenamiento las enfrías con almohadillas frías. Eso ayudó un poco con el dolor, pero sobre todo lo que hice fue cambiar el entrenamiento y aguantar el dolor. Ahora, cuando hago press de banca largos muy pesados en la fase de preparación para una competición, me duelen todas las articulaciones. Entonces pensé en cambiar el entrenamiento y entrenar de forma diferente, porque aguantar el dolor era insportable. No necesariamente tienes que entrenar duro para desarrollar músculo, sino que también puedes entrenar de manera más enficiente y más inteligentemente.

Sí como he comentado, soy culturista de competición y llevo 10 años con entrenamientos de fuerza. Empecé con las competiciones en 2015 y me enganché enseguida. Estos estrechos trofeos de ahí arriba y esta estatua, son de mi primera competición, que fue el Campeonato de Novatos en Bélgica, donde quedé segundo. Lo más importante es darse cuenta de que el culturismo y la musculación llevan tiempo. Me gustaba el sufrimiento y el sacrificio, porque era algo nuevo a lo que el cuerpo no está acostumbrado. La primera dieta de competición fue una prueba mental muy dura, estuve 7 meses a dieta, soñaba con la comida y también lloraba porque estaba agotado. Pero tenía actitud de "dije que lo iba a hacer y voy a hacerlo". Tengo que decir que mi carácter se desarrolló mucho con el culturismo y se convirtió en mi verdadera pasión. Una de las victorias de las que estoy más orgulloso fue el año pasado cuando acabé campeón de Alemania en la categoría Classic Physique. Y todavía sigo queriendo subir al escenario el año que viene. Incluso cuando nació nuestra hija, dije que quería seguir con el deporte y no limitarme. Este año me tomo un descanso porque el segundo hijo está por nacer. Pero sí, esta es mi colección de trofeos, pero ahora no solo soy culturista de competición, sino también entrenador y preparador físico. Hace un rato estaba entrenando con amigo mío al que también estoy preparando para la temporada de otoño y hemos estado practicando poses. 

Tengo varias enfermedades, como muchas personas de mi edad (70 años). Una, en concreto, está afectando mucho a mi calidad de vida. Se trata de una enfermedad neurológica incapacitante, autoinmune, no rara, pero difícil de diagnosticar y, hoy por hoy, sin tratamiento: padezco fibromialgia desde hace unos quince años, pero me la diagnosticaron hace sólo seis. Lo único que podemos hacer es aprender a "vivir con ella" y tratar de aliviar algunos de sus síntomas: depresión, dolor crónico, fatiga crónica, poco sueño, cansancio, etc. En cuanto a los remedios, aparte de los esfuerzos mentales para sobrellevar la enfermedad y mantener la actividad física, sólo los fármacos pueden aliviar estas diversas dolencias. Medicamentos que sólo tienen un éxito parcial y a costa de desagradables efectos secundarios. Por tanto, decidí recurrir a otras soluciones distintas de la medicación, sin eliminar estos tratamientos, pero sin ningún éxito. Sabía de la existencia del cannabis terapéutico, pero nada más. Probé una infusión casera de hoja de cannabis: repugnante. Entonces oí hablar del CBD, del que no sabía nada, y que descubrí a través de Internet. Vi que el CBD se utiliza en los hospitales, que no está reconocido como medicamento, que no es tóxico ni adictivo, y que probablemente fuese adecuado para mí. Además, en ese momento, también descubrí y empecé a utilizar la magnetoterapia, y me fue muy bien. Entonces pensé, ¿por qué no probar el CBD? La investigación en Internet me llevó a varios sitios comerciales, entre los que elegí Naturecan ya que me pareció una página seria y confiable. Pedí cápsulas por su practicidad y su liberación progresiva, que corresponden bien al espíritu de "tratamiento de fondo" que favorezco y que integro en mi medicación de rutina. Luego, el aceite con melatonina, pero que solo tomo una hora antes de acostarme para favorecer el sueño y un efecto más rápido, además de una cápsula cuyo efecto es más tardío pero más repartido. El aceite permite conciliar el sueño más rápidamente. Tomo el CBD en el marco de una rutina bien pensada y controlada: en combinación con otros medicamentos tomados por la mañana y por la noche, y no de forma aleatoria o lúdica.

Me resulta difícil describir con precisión los efectos de mi consumo. Sin embargo, las sensaciones generales y diferencias principales fueron que mi dolor se redujo y mi sueño mejoró en comparación con antes de tomar CBD. Aunque parezca una mejora relativa, ya es muy importante (¡la fibromialgia es horrible!). También me ha llevado a reducir los tratamientos iniciales, como reducir la dosis de paracetamol (dividiendo la ingesta por 2), la dosis del antidepresivo, y he suprimido totalmente un famoso analgésico opioide: el Tramadol. Gracias a ello, mi hígado y a mis riñones, no están sometidos a tanto trabajo y estoy menos " deprimido ", y he podido salir de la adicción a los opiáceos. También me gustaría subrayar la importancia de hablar con tu médico antes de tomar CBD cuando estás en tratamiento por una patología concreta: mi médico de cabecera y mi cardiólogo conocen perfectamente mi enfoque y no muestran ninguna oposición. Sin considerar mi experiencia y mis sensaciones personales como verdades médicas, no dudo en compartir mi satisfacción por el uso de los productos de CBD de Naturecan. Por el momento sólo estoy utilizando los productos mencionados anteriormente. Estoy pensando en empezar a tomar una cápsula de melatonina por la noche en lugar de la cápsula normal, además del aceite de melatonina. He mirado los complementos alimenticios y los bálsamos para las articulaciones, pero aún no los he pedido. También he visto muchas críticas positivas sobre las gominolas. Quiero aclarar que este es mi caso y mi experiencia, no quiero confundir a nadie con jugar con un tratamiento.

He estado tomando CBD durante 2 meses y decidí seguir tomándolo tras 15 días de empezar.

Tomo cápsulas por la mañana y por la noche (2 por la mañana y 1 o 2 por la noche) y el aceite (7 gotas por la noche). En total, consumo entre 40 mg y 50 mg al día.

Las cápsulas, por lo prácticas que son.